Mi obra es matérica con lo que logro explorar la tridimensionalidad que al sumarse los contrastes cromáticos potencian mi expresividad, abriéndose a los sentimientos y al espíritu.
Con una temática cotidiana quiero cuestionar la visualidad y llevar mi pintura, mas allá de lo estético por medio de de manipulaciones plásticas que jueguen con el referente, experiencia, conocimiento y por lo tanto los sentimientos.
Al tomar el desecho constructivo y en general lo abandonado, encuentro otra temática cotidiana y produzco una reflexión para encontrar su esencia de pertenencia a nuestro imaginario visual, y le busco la dignificación en mi intento de llevarlo hasta a la frontera poética.
El trabajo de texturas y de objetos que forman parte de mi obra, especialmente en los paisajes, potencian lo que el gran paisajista ingles W. Turner nos dio a conocer en el concepto de lo “sublime”: la energía impredecible de la naturaleza y la complejidad de sensaciones que no son exclusivamente visuales sino que también táctiles.
Este es mi camino que se complejiza diariamente al estar en una actitud alerta y abierta a las nuevas tecnologías y su uso en el mundo de hoy.