Diana Armas, pintora por naturaleza y vocación. La pintura es para mí una forma de vivir, de servir, de fluir con el universo. Lo principal ha sido ir más allá del lienzo, porque la pintura está tan viva, es espíritu plasmado, atrapado en la materia sublimada, materia transformada en energía. El arte es alquimia, la transformación de la realidad, de la nada en algo, la habilidad de crear tesoros.